¿Una mala salud oral puede afectar al rendimiento escolar de nuestros hijos?

Por todos es sabido, que cualquier tipo de patología que presentan nuestros hijos, afecta en menor o mayor medida a sus notas en el cole y a su rendimiento escolar. Tener que ir al medico/dentista con frecuencia implica que el menor falte a algunas clases, y aumente también el absentismo laboral de sus padres, que tienen que acompañarlo.

Los padres, hacen todo lo posible para que a sus hijos les vaya bien en el cole, para que hagan actividades después de clase,etc. Los acercamos al autobús para que no lleguen tarde, los llevamos a baloncesto, piano, violín, equitación, y toda clase de actividades que ayuden al correcto desarrollo del niño, no nos importa tener que estar con el coche de aquí para allá, y quitarnos tiempo a nosotros mismos.

Pero ¿Que ocurre con las visitas al dentista?, en ocasiones sólo los llevamos al dentista cuando les duele algún diente, el niño se queja, tiene algún «flemón», o porque consideramos que algún diente le está saliendo torcido. Y en la mayoría de las ocasiones, estás visitas de urgencia se producen en horas lectivas, con lo que nuestros hijos pierden clase. Un reciente estudio de la USC (University of Southern California) pone de manifiesto la relación entre la mala salud oral y los malos resultados escolares. En general los niños de educación básica pierden un total de 6 días de colegio al año, y los adolescentes en el instituto pierden 2.6 días. Para los niños de educación básica, 2.1 días de perdida de clases son debidos a dolencias dentales, y en los adolescentes 2.3 días. Además los padres pierden unos 2.5 días de trabajo al año por tener que acompañar a sus hijos al dentista.

Pero que pueden hacer los padres para mejorar esta situación?

  1. Asegurate de llevar a tu hijo al dentista cada 6 meses para su revisión. Aprovecha para revisar tu boca también, para que el niño vea que tu también te preocupas por tu boca. Esto permitirá que si el dentista observa algunas patología lo solucione en visitas programadas de manera que el niño no pierda colegio
  2. Vigila la dieta de tu hijo. Sobretodo la cantidad de azúcares. Refrescos, zumos, bollería industrial, caramelos, etc., son alimentos que tus hijos consumen a diario, y tienen una cantidad de azucar elevadísima
  3. Ayuda a tus hijos a cepillarse. La mayoría de los niños no se cepillan todo lo que debieran, y si se cepillan no lo suelen hacer correctamente. Hasta que tienen 7 ó 9 años no  son capaces de cepillarse correctamente por sí solos. Utiliza de vez en cuando pastillas reveladoras de placa, y examina si tu hijo se cepilla bien. Con respecto a la seda dental, los padres tienen que ayudar a sus hijos, pues es una técnicas mas complicada y que requiere paciencia.